Tras los hechos ocurridos el día lunes 5 de noviembre cuando, a empujones, fue echado de sus oficinas el encargado de despacho de la Secretaría Municipal de Seguridad Pública y Tránsito (SMSPT), Jesús Pérez Abarca, tras ordenar detectar narcotienditas, quedaron al descubierto ciertos grupos policiales al servicio de otros intereses, sobre todo cotos de poder y privilegios.
Un día después, empresarios, líderes religiosos y políticos expresaron su repudio a lo acontecido aquel día; y ayer, en conferencia de prensa, la alcaldesa Mara Lezama expresó que fortalecer las capacidades municipales en seguridad requiere recursos, que en el caso del municipio son escasos e insuficientes; por ello, dijo, se trabaja con los demás órdenes de gobierno un convenio de asunción de mando único.
“Se trata que las estrategias policiales estén reguladas bajo una misma visión y den mejores resultados”.
Reiteró que las acciones llevadas a cabo el lunes pasado por algunos elementos de la policía municipal son inaceptables, y bajo ninguna circunstancia deben repetirse.
Con esta medida, el gobierno del Estado y en particular el secretario de Seguridad Pública estatal, serán los responsables de ejecutar la estrategia para recuperar la paz y la tranquilidad en todas las regiones del municipio, así como de informar al cabildo y a la ciudadanía de los avances, acciones y resultados en estos temas.
Enfática, Mara Lezama puntualizó que con esta decisión, el ayuntamiento no renuncia a las tareas que le corresponden, sino que los recursos humanos, financieros y materiales del municipio, se suman a una estrategia común que muy pronto se refleje en los resultados que la ciudadanía demanda.