Mérida, 14 de mayo, 2025.-. La tragedia se agrava. Este miércoles falleció Fabiola, joven esposa de Ángel, quien también murió junto a su bebé no nacido tras ser atropellados por Víctor Manuel R. B., de 20 años, el pasado 29 de abril en Altabrisa, la noticia que ha desatado una ola de indignación en la capital yucateca.
El accidente sucedió cuando el conductor de la camioneta ignoró la señal de alto y embistió brutalmente a la pareja que regresaba a su hogar en San Camilo, Kanasín, a bordo de una motocicleta tras cerrar su puesto de papas fritas en Komchén. Fabiola tenía 26 semanas de embarazo. El conductor huyó del sitio sin prestar auxilio y según aseguran testigos presenciales, que incluso le pasó por encima a Ángel al escapar.
El cafre fue perseguido por algunos ciudadanos presentes en el sitio y lograron detenerlo y lo entregaron a las autoridades.
Si bien es cierto que la juez de control Silvia Pamela Cetina Bautista le impuso medidas cautelares distintas a la prisión preventiva, ésta no se aplica automática u oficiosamente, sino que es aplicable cuando se corre el riesgo de que el presunto culpable no se presente a juicio. Es por eso que se utiliza el brazalete electrónico y otros procedimientos cautelares.
Ahora con el fallecimiento de Fabiola, como tercera víctima, se agrava la situación de Víctor Manuel R. quien deberá ser sometido a juicio y este lamentable y doloroso hecho que ha enlutado a dos familias, no quede en la impunidad y sea falso que por influencias la justicia ha sido comprada.
Ángel, Fabiola y su bebé son ahora símbolo de una exigencia colectiva: justicia verdadera y castigo para el responsable. La sociedad yucateca no está dispuesta a permitir que este triple homicidio quede en el olvido.