De esta manera se despidió, uno de los tres peores directores que ha tenido la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán, Manuel Carrillo Esquivel, siguiendo ese viejo dicho popular de al pueblo pan y circo. Se dice que no hay mal que dure cien años… Al próximo director se le sugiere entrar con lupa y una buena escoba porque hay mucho tiradero y basura por quitar en el camino, eso sí, que busque bien, porque algunas ratas andan bien escondidas, pues cuando el barco se hunde; esas saltan primero. Elogiamos el empeño de Carrillo Esquivel por cerrar con broche de oro su administración, al basificar a operadores políticos del PRI, familiares y amigos de los aún funcionarios de la Junta afines a él y nivelaciones salariales para los cuates. Reubicaciones de área a empleados que carecen de estudios profesionales e incluso para ocupar sencillamente un área administrativa cualquiera dentro de una dependencia de gobierno. En fin, conociendo la trayectoria, experiencia política, electoral y de servicio dentro del quehacer gubernamental federal y estatal de quién encabezará la nueva administración de esta paraestatal, es que tenemos la certeza de que NO se lo llevarán al baile, como de manera ilusa piensan los priistas aferrados al barco del erario público. Sin duda, a varios (as) les tocará bailar con la más fea.
#aylaculebra