Elementos del Ejército y personal de Petróleos Mexicanos hallaron una toma clandestina ubicada cerca de la comisaría meridana de Tamanché, a la orilla de la carretera Mérida-Progreso, donde se extraía de manera ilegal diésel de los ductos de Pemex
El informe no reporta si hubieron detenidos, pero se confirmó que la toma de ocho pulgadas que transporta diésel y conecta las Terminales de Abastecimiento (TAR) de Progreso a Mérida, ya fue clausurada por personal de PEMEX.
En un recuento de los últimos años se han denunciado frecuentes robos de combustible en Yucatán.
Y en octubre de 2017, se destapó el caso de huachicol en la comisaría de Komchén. Con ayuda de mangueras y bombas eléctricas, los delincuentes extraían el combustible y lo almacenaban en tanquetas y bidones para luego sacar el producto en camionetas, combis y camiones de redilas; el 22 de junio de 2018 se encontró una toma clandestina en Sierra Papacal.
Menos de un mes después, el 19 de julio, una toma clandestina que se ubica en esa misma localidad explotó en horas de la noche cuando varios sujetos intentaban perforarla, dejando como saldo tres muertos y tres lesionados que al final fueron dejados en libertad por un juez federal que consideró que su detención y posterior presentación al Ministerio Público fue ilegal.
El 18 de noviembre pasado, elementos del Ejército y de Petróleos Mexicanos hallaron otra toma clandestina, en esta ocasión en la comisaría de Paraíso, a ras de suelo, sin embargo, en esta operación no hubo detenidos.