El titular de la Dirección de Transporte del Estado de Yucatán (DTEY), Humberto Hevia Jiménez, reveló que la dependencia analiza la posibilidad de incrementar las tarifas al transporte público que desde hace más de ocho años no tienen modificaciones.
Dicha alza, serviría para mitigar el impacto de los gasolinazos, que han encarecido el diésel y las refacciones que utilizan la mayoría de los transportistas.
Aunque por el momento los concesionarios no han solicitado de manera oficial un incremento al precio, Hevia Jiménez dijo que “están conscientes de que en cualquier momento se pueden acercar a pedirlo, pues es un tema que siempre ha estado en la agenda de la DTEY desde que inició la modernización del sistema de transporte”.
“Lo que hemos platicado con los concesionarios, más que un alza de transporte, es que tendríamos que ver la reingeniería de rutas y hacer tener mayor ocupación. Desde hace ocho años se mantiene la tarifa de $3 pesos y desde hace dos años, la de $7 pesos, a pesar de que los insumos van incrementando de precio, como son las gasolinas y los combustibles”, refirió.
El funcionario explicó que de las más de 220 rutas que exiten en la capital yucateca, entre el 20 y 25 por ciento estarían obsoletas, ya que el cambio de oficinas gubernamentales provocó una considerable disminución en el número de usuarios.
Un ejemplo de esto –expuso-, es que la ruta de reforma, la cual era una de las mejores de la ciudad, dejó de ser rentable al desaparecer la Secretaría de Seguridad Pública.
“Aun poniéndole una tarifa de $20, no sería rentable porque no hay ocupación”, aclaró.
Entre los trabajos previstos sigue el establecer nuevas rutas de tipo radial, transversal y circuitos.
Con el nuevo sistema de transporte hay ocho rutas y se ‘estrenarían’ ocho más para ir mejorando la ocupación y frecuencia, lo que conlleva nuevas unidades y paraderos, detalló.