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“Elefante blanco” fue la calificación que la funcionaria de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Zareth Reyes Alanís dio a el Gran Museo del Mundo Maya, durante la conferencia que ofreció ayer a los alumnos de la Facultad de Economía de UADY, en el marco del 41º. Aniversario de la Facultad, considerando que no cumple para lo que se construyó y su costo de mantenimiento es alto.
“Es evidente que no hubo un análisis ni de la oferta ni de la demanda. Nada más dijeron ‘nosotros aquí tenemos cultura maya y vamos a hacer un árbol, y va a haber gran demanda’, pero la realidad es otra”, indicó tras mostrarse sorprendida de que el recinto se use para eventos del gobierno.
La parte fundamental de su conferencia “Evaluación socioeconómica de proyectos y su importancia”, fueron los “elefantes blancos” en la que dejó claro que se deben evitar este tipo de obras, ya que nacen por diferentes razones entre los que se cuentan escasez de recursos para terminar las obras, no se previeron costos de operación y mantenimiento o no se comprobó la factibilidad del proyecto.
Zareth Reyes es egresada de la licenciatura en Economía por el ITESM; como dato anecdótico, señaló que el término surgió en Tailandia, donde los reyes del antiguo Siam regalaban elefantes albinos a los integrantes de su corte que querían ver en desgracia, porque el costo de mantener un elefante blanco era tan alto, que los dueños acababan en la ruina.
De ahí que el término se adoptara para definir a los proyectos de infraestructura pública de los que uno no se puede deshacer, pero mantenerlos u operarlos sale muy caro. Un ejemplo es la Estela de Luz, en Ciudad de México.
La funcionaria indicó que el problema de los “elefantes blancos” no es exclusivo de México: también se da en países desarrollados como España, donde se construyó un aeropuerto en una zona rural cercana a Barcelona y hasta hoy solo ha movido a 300 personas, así como el caso de un estadio de fútbol en Brasil, que a la fecha funciona como terminal de autobuses y señaló que todo proyecto debe cumplir tres objetivos principales: satisfacer una necesidad, resolver un problema y aprovechar una oportunidad.
“Hay tantas personas con carencias sociales y todas estas carencias son de interés público; es decir, que son un problema para el país”.
“Todo esto nos lleva a la teoría del bienestar, que va ligada con la evaluación socioeconómica de proyectos que sirve para hacer más rico al país, a las personas, para que no perdamos, para que no tengamos tantos Duartes en el país o tantos gobernadores que solamente prometen sin hacer una evaluación, sin saber si el país va a perder o ganar con ese proyecto”.
