En un boletín se dio a conocer que la atención a las llamadas de auxilio y el despacho de los servicios se realizan desde la Unidad de Monitoreo e Inteligencia Policial (UMIPOL-C4) de la Dirección General de la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno del Estado, puesto que ahí confluyen las instituciones de seguridad y se cuenta con la infraestructura y personal capacitado.
La implementación del “911” da cumplimiento al acuerdo 10/XXXVII/14 del Consejo Nacional de Seguridad Pública.
Éste aprobó un Servicio Homologado para la atención de llamadas de emergencia en todo el país que opere de manera estandarizada a nivel nacional, reduzca los tiempos de Atención y mejore la calidad de servicio prestado a la ciudadanía.
Yucatán es una de las entidades que comienzan el 9 de enero la operación del 9-1-1 y así queda implementado este número único de emergencias en todo el país.
Una emergencia es aquella situación en la que está en riesgo la vida, la integridad física y el patrimonio.
Previo a la implementación del 9-1-1 en Yucatán, operadores de la UMIPOL se capacitaron en los protocolos para su operación durante unos cursos diseñado por la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) con el respaldo del Centro Nacional de Información y el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
La capacitación cumple con la Norma Mexicana para la estandarización de los servicios de atención de emergencias.