La publicación en el Diario Oficial del viernes pasado, acerca de que la Comuna meridana está elaborando una nueva reglamentación para el funcionamiento de bares y discotecas en el Centro Histórico de nuestra ciudad, ha creado inconformidad en algunos sectores que se muestran disgustados con la hora límite para la música con volumen alto en esos lugares, sea hasta las 11:30 de la noche.
Las reacciones se han dado principalmente en las redes sociales, principalmente de jóvenes que disfrutan de estos espacios nocturnos.
“Mérida se ha convertido en una ciudad de viejitos, no tienen idea de a cuantos músicos, familias y empleos afectan con esa decisión”, publicó Andrea Salazar en su cuenta de Facebook, así como también culpan de esta decisión a extranjeros que han adquirido predios en el centro, publicando que se vayan del estado.
“Si no les gusta que se regresen, dejen a los yucatecos en paz, muchas familias viven de eso, y si el ayuntamiento fuera astuto no prohibiría estos espacios de diversión nocturna”, publicó Patricia Sánchez en su cuenta de la red social.
Los jóvenes depositan sus esperanzas en que el ayuntamiento reconsidere su decisión, y permita que los espacios puedan seguir laborando de manera cotidiana.
“Esperamos que se den cuenta de cómo nos afecta, de cómo afecta la economía de muchas familias, como el centro se va a ver apagado durante las noches, como este atractivo turístico va a desaparecer”, concluyó Roberto Carvajal.