Un total de 50 personas establecidas en la región de Paso de los Caballos, y que viven en las inmediaciones del río Usumacinta corren el riesgo de inundarse, debido a que el afluente se encuentra por arriba de su nivel máximo ordinario y empezó a verter agua a la zona.
Dicha comunidad se encuentra localizada en la región suroeste de este Municipio, entre los límites con Tabasco, tan solo a 50 kilómetros de la cabecera municipal, en donde 20 familias viven el riesgo de inundación y podrían quedarse incomunicadas por vía terrestre, pues el agua del afluente ya alcanzó el camino vecinal Pucté-Paso de los Caballos, donde hay presencia de láminas de agua, hundimientos y deslave en la carpeta asfáltica.
Los ganaderos, ante el temor de que sus animales se van afectados, los trasladaron a zonas altas, mientras que los agricultores recolectaron sus milpas antes que el agua pudra los granos y se pierda la cosecha.
Al igual, el agua está afectando las localidades ribereñas El Mangal, Tila y La Corriente, en cuyas rancherías viven unas 350 personas.
Por ello, la Policía Municipal mantiene una estrecha vigilancia en la carretera federal Santa Adelaida-Palizada, y en el camino Pucté-Paso de los Caballos, que están siendo amenazados por el agua del “Mono Sagrado”.