A pocos meses de haber llegado a Mérida para vivir, José Eduardo tenía conflicto con locatarios y vecinos de la colonia Uxmal San Pablo, donde vivió por dos meses, esto debido a su adicción con las drogas. En sus cinco sentidos, José Eduardo era un joven callado que no hablaba mucho y hasta podría decirse uraño. Llegaba al edificio, saludaba a los que se encontraba …
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