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El líder sindical del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), José Enrique Vidal Dzul Tuyub, señaló al delegado Eduardo López Calzada como verdadero responsable del dinero faltante de la taquilla del Parador Turístico de Chichén Itzá, y no los cuatro trabajadores acusados de un presunto robo por 3.5 millones de pesos; “son víctimas” de los errores administrativos que prevalecen en esta dependencia.
También acusó al delegado López Calzada de la inhabilitación de esas cuatro personas.
Vidal Dzul Tuyub, al reprobar la inhabilitación de los trabajadores, afirmó que “lo peor es que ninguno de los titulares del INAH Yucatán, recibió multa alguna”. Insistió que el verdadero responsable es el delegado Eduardo López Calzada.
Sin embargo, el secretario general del Sindicato Nacional del Sindicato Nacional de los Trabajadores Administrativos y Manuales del INAH, no especificó que la auditoría y la sanción administrativa, fue una decisión que tomó la dirección del INAH, en la Ciudad de México.
“Al registrarse un faltante por no tener un control (de la entrada de ingresos), acusa a otras personas”, dijo.
En días pasados, el funcionario federal expresó que la auditoría empezó con todas las direcciones, luego se particularizó hasta llegar a la taquilla de Chichén Itzá, donde se detectó la anomalía en la cual estuvieron implicadas cuatro personas.
Uno fue despedido y los tres restantes fueron suspendidos por tres meses, ya que conocían el delito pero nunca lo reportaron.
Dzul Tuyub exigió que los cuatro trabajadores afectados sean reintegrados a su centro de trabajo, ya que “no pueden ser los paganos de los errores de otras personas”.
Presentó el Manual de Procedimientos del Instituto, en el cual se establece las acciones de control de la venta de boletos; en el artículo 4.3 se determina que el administrador y el delegado son los responsables directos de las cuentas diarias que rinde el personal de la taquilla.
Insistió que “hubo un error administrativo, por eso urge las modificaciones al Manual de Procedimientos”, para evitar que más personas sean afectadas.
Señaló que la carencia de material de papelería, es otra anomalía en el cobro por el ingreso a la zona arqueológica.
“La liquidación diaria de la venta de boletos se sigue haciendo en libretas privadas del personal de la taquilla”, por lo que no hay documentos oficiales que permitan llevar una cuenta real.
Entre los factores externos que también provocan problemas está la falta de instituciones bancarias en Pisté, comisaría de Tinum, así como de Internet, pues sólo en algunos puntos se cuenta con el servicio, manifestó.
En conferencia de prensa aseveró que López Calzada tiene a su cargo las finanzas de las 17 zonas arqueológicas abiertas al público, por lo que es el responsable del manejo del dinero.
