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El Día del Policía pasó desapercibido al mantenerse la protesta de los elementos policiacos municipales en las instalaciones de la Dirección de Seguridad Pública, Vialidad y Tránsito Municipal (DSPV Y TM), ante la inconformidad del pagos de aguinaldo que les fue depositado durante un día después del plazo que marca la ley y en el que se reflejan descuentos de impuesto del Impuesto Sobre la Renta (ISR).
Tras dos horas de reuniones con la titular de tesorería Ligia Patricia Castillo Góngora y Gladys del Carmen García Casanova, directora de la Unidad Administrativa, los uniformados desistieron del paro de labores, sin embargo presentaron una denuncia formal colectiva ante las instancias correspondiente por el descuento económico que les realizaron en la prestación del aguinaldo, que marca como obligatoria la Ley Federal del Trabajo.
A pesar que se contó con la presencia de representantes del Colegio de Contadores locales, los municipales indicaron que se violentaron sus derechos laborales por lo que siguieron el consejo de su abogado Jorge Salazar Cruz, en proceder de manera legal en contra de la Comuna que encabeza Pablo Gutiérrez Lazarus.
De igual manera dieron a conocer que existen descuentos que no son justificados, por lo que buscaran acción legal para que les sea devuelto lo que la Comuna no logró comprobar, siendo esta parte una prueba más de la corrupción que se vive en el actual gobierno municipal.
Por su parte, el titular de la dirección de Seguridad Pública, Carlos del Rivero Galán, indicó que el descuento que les realizaron a los elementos policiacos no corresponden al mismo del año pasado, por lo que externan su inconformidad a través de un paro laborales solo en el área operativa ya que cuentan con el apoyo de la Policía Estatal Preventiva, la Policía Federal división gendarmería y la Agencia Especializada de Investigación, quienes hacen rondines y realizan la labor preventiva.
Durante la reunión con las autoridades les fue evidenciado que el que paga el salario de los policías municipales es el gobierno del Estado y no el Ayuntamiento como en su momento se harto en decir el munícipe Lazarus parafraseando “El que paga manda”, dejando en evidencia su soberbia, misma que fue derrocada por sus propios trabajadores de la Tesorerías Municipales y la titular de la Unidad Administrativa.
