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La tarde de ayer comenzaron a circular en Cozumel unas fotografías en las que se aprecia el casco bajo el agua de una embarcación perteneciente a la empresa Barcos Caribe, fondeada a 500 metros del muelle fiscal “San Miguel”, la cual presentaba dos artefactos que, según se dijo, eran explosivos.
A decir de muchos, no es más que una trama para victimizar a dicho consorcio, bajo el supuesto de que esto le beneficiará luego de que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) determinó la suspensión de sus actividades por no contar con seguros de viajero, luego de la explosión que sufrió una de sus embarcaciones en el muelle fiscal de Playa del Carmen, el pasado 21 de febrero.
En este sentido, se sabe que en las redes sociales ha corrido la versión de que la empresa está siendo víctima de una “guerra sucia” que perjudica no sólo a las familias de sus trabajadores, sino a los turistas nacionales y extranjeros que utilizaban sus servicios al ofrecer las tarifas más bajas del mercado, de ahí la expectación que causó la noticia de que dos bombas fueran encontradas en otro de sus barcos.
Por si fuera poco, según se dice y se rumora, fueron empleados de Barcos Caribe los que hicieron llegar las fotografías en cuestión a la Secretaría de Marina (Semar), bajo el argumento de que fueron tomadas por un buzo que inspeccionaba el fondo marino en donde está anclada la embarcación, lo cual hace suponer que fueron ellos mismos los que las difundieron a través de las redes sociales con el afán de captar la atención de la población.
Al respecto, cabe señalar que anoche el Gobierno del Estado emitió un comunicado en el que se indica lo siguiente:
Un informe preliminar de la Administración Portuaria Integral de Quintana Roo (Apiqroo) dio a conocer que lo comentado en redes sociales relativo a la embarcación de Barcos Caribe, señalada como portadora de un supuesto artefacto explosivo, sólo se usaba para transportar refacciones, se encontraba ubicada a 500 metros de la costa de Cozumel y tiene 10 meses sin operar, pues no cuenta con la concesión de navegación respectiva.
La embarcación señalada de Barcos Caribe no representó, ni representa, ningún peligro para los pasajeros cotidianos de Cozumel ni para los turistas que visitan nuestros destinos turísticos.
El Gobierno del Estado trabaja para preservar la tranquilidad de los habitantes de Quintana Roo, así como de los visitantes.
Hay un trabajo coordinado entre los tres niveles de Gobierno, en el que destaca la intervención del Ejército y la Marina para reforzar las medidas de seguridad en los muelles.
La Fiscalía General del Estado de Quintana Roo tiene abierta una investigación sobre este suceso y el ocurrido el 21 de febrero pasado, ambos de Barcos Caribe.
Finalmente, vale la pena destacar que hasta el cierre de esta edición, la Secretaría de Marina-Armada de México no había realizado señalamiento alguno sobre el asunto.
