lunes , 18 marzo 2024

Militarización a medias

José Santiago Healy

Fuente: Diario de Yucatán

Finalmente la oposición se impuso y la iniciativa para extender hasta el 2028 la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles del país fue regresada a comisiones en la Cámara de Senadores.

Con ello Morena y sus aliados sufren una severa derrota, sin descartar que la propuesta que presentó el PRI y que fue aprobada anteriormente por la Cámara de Diputados pudiera ser votada de nuevo en las próximas semanas.

López Orador seguramente echará pestes a sus adversarios en los próximos días porque esta iniciativa significaba un logro crucial para su gobierno luego de haber conseguido que la Guardia Nacional fuera legalmente endosada al Ejército mexicano.

Fue en 2019 cuando el Congreso mexicano aprobó una reforma constitucional para permitir que el Ejército y la Armada de México pudieran realizar actividades fuera de sus cuarteles hasta 2024.

El freno en el Senado de la extensión de este permiso hasta 2028 no afectará directamente al actual régimen morenista, sin embargo deja en una grave disyuntiva el futuro de la Guardia Nacional.

La pregunta que surge es si este cuerpo policiaco que será controlado por el Ejército mexicano y cuyos integrantes son en su mayoría militares, podrá operar legalmente en todos los rincones del país al concluir en 2024 el permiso constitucional.

Conforme transcurre el sexenio queda más en claro que el principal fracaso de López Obrador ha sido su estrategia contra la violencia y la inseguridad de México.

Como candidato presidencial, cuestionó siempre la intervención de las fuerzas armadas en la persecución de la delincuencia organizada del país.

Pero como presidente mantuvo al Ejército y a la Marina en las calles, creó la Guardia Nacional con una amplia base y estrategia militar y ahora finalmente intentó extender hasta 2028 la presencia militar en todo el país.

Pero en el fondo no existe una labor operativa y de inteligencia que conduzca al combate firme y efectivo contra el crimen organizado y con ello una sensible reducción de homicidios dolosos, desapariciones, secuestros, etcétera.

En anteriores gobiernos al menos existían metas específicas, algunos iban sobre las riquezas de los carteles, otros confiscaban droga y armas al por mayor, y casi todos presumían de atrapar a los grandes capos.

Pero con López Obrador no se sabe cuál es la estrategia: Rafael Caro Quintero es prácticamente el único capo de alto nivel arrestado en el sexenio y ya ni hablar de la liberación de Ovidio Guzmán, el hijo de Joaquín “el Chapo” Guzmán.

Así las cosas la militarización del país con la Guardia Nacional a la cabeza servirá de poca cosa mientras no se pongan en marcha planes de acción efectivos y bien coordinados en todo el país.

Claro al menos que sea totalmente cierto que el régimen morenista protege a todos los carteles mexicanos lo que sinceramente nos resistimos a creer.

Esto sin olvidar que gobiernos anteriores se coludían con ciertos carteles y perseguían al resto, en el sexenio actual sería entonces una colusión total a decir de los resultados obtenidos o bien una completa ineptitud.

Por cierto, lo que sí logró López Obrador y colaboradores fue fracturar la coalición de partidos de oposición cuando el PRI con Alejandro Moreno a la cabeza apoyó la propuesta de extender la presencia militar.

En el Senado le faltaron a Morena de dos a cuatro votos para aprobar la iniciativa que requería las dos terceras partes de los votos.

Ya veremos si lo consiguen en las próximas horas.

Noticias, noticias…

Mientras el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, clama por la paz ante las Naciones Unidas y solicita castigar la invasión a su país, el líder ruso Vladimir Putin convocó a una movilización militar para reclutar a 300 mil reservistas y de nuevo amenazó con recurrir a las armas nucleares en caso de un ataque a Rusia.

Urge poner freno a los desplantes de Putin antes de que sea demasiado tarde.— Hermosillo, Sonora.

jhealy1957@gmail.com

Periodista

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