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La población más vulnerable para las enfermedades estomacales o gastroenteritis aguda, son los niños menores de cinco años, especialmente cuando el clima es lluvioso y aumenta el calor, y también por cuestiones de hacinamiento, medidas deficientes de higiene y mala alimentación. Yucatán registraba una tasa de tres por cada mil menores de cinco años diagnosticados con enfermedad diarreica aguda. Si se toma en cuenta que el total de la población referida es de 170 mil, se registraron unos 510 casos en la semana epidemiológica 24.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2012, Yucatán se encuentra entre los estados que presentan mayor cantidad de diarreas. En México, la diarrea es la segunda causa de morbilidad y mortalidad en menores de cinco años, solamente rebasada por las infecciones respiratorias, como la neumonía.
Debido al clima caluroso y las lluvias a lo que se suman condiciones de hacinamiento y desnutrición en algunas colonias, la capital yucateca es considerada punto de riesgo para las infecciones diarreicas, advierte el especialista Jorge Moreno Martínez, pediatra infectólogo.
Moreno Martínez explicó que por el clima, Mérida puede ser considerada como “zona de riesgo”, pues las altas temperaturas propician falta de agua potable y la rápida descomposición de los alimentos.
Algunas de las recomendaciones médicas realizadas por la ENSANUT 2012 ante las diarreas son:
No interrumpir la alimentación habitual o lactancia materna
Aumentar el consumo de líquidos
Usar planes de hidratación con suero oral
Identificar los signos clínicos de alarma
Vacunación oportuna contra rotavirus a los niños de dos y cuatro meses de edad
Reducir el uso de antimicrobianos
“La diarrea es ocasionada en 75 de cada cien casos por virus (rotavirus y norovirus), 20 de cada cien por bacterias y cinco de cada 100, por parásitos. Otros factores que influyen son el nivel socioeconómico del niño, si asiste o no a guarderías, el aspecto nutricional o alguna enfermedad adyacente, tales como: desnutrición, tuberculosis, diabetes, problemas del corazón o cáncer”, explicó el especialista.
Las guías médicas internacionales: “La European Society for Pediatric Gastroenterology, Hepatology, and Nutrition” y la “European Society for Pediatric Infectious Diseases” (Eapghan y Espid, por sus siglas) recomiendan que las intervenciones médicas efectivas, en el manejo de la diarrea, incluyen la administración de probióticos específicos, tales como Lactobacillus GG o Saccharomyces boulardii, medicamentos coadyuvantes como la diosmectita y administrar antibióticos sólo en casos excepcionales.
El especialista indicó que la diarrea es más frecuente durante los primeros dos años de vida, lo que convierte a los pequeños en población vulnerable y que la mayor parte de los medicamentos coadyuvantes están contraindicados en niños menores de dos años.
