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Un nutrido grupo de manifestantes integrantes de sindicatos, agrupaciones estudiantiles y sociedad civil, tomaron las calles ayer por la tarde para rechazar públicamente el alza de tarifas del transporte urbano, así como también demandar una reingeniería social que mejore el servicio, así como establecer mesas de diálogo entre gobierno, concesionarios e integrantes del Movimiento por la Movilidad de Mérida.
El contingente partió del Parque de San Juan rumbo a la Plaza Grande, alrededor de las 5.45 iniciaron la marcha hacia el Palacio de Gobierno y Palacio Municipal.
“¡No al alza, al pueblo no le alcanza!”, fue el grito que durante todo el trayecto sonó, seguido de otro que decía “Lucha, lucha, lucha, no dejes de luchar, por un transporte urbano, eficiente y popular”.
Visitaron las instalaciones de la Alianza de Camioneros de Yucatán (ACY), demandando que gobierno y concesionarios mejoren el servicio público, así como la transparencia de concesoiones en cuanto a quienes son los que las tienen y cuáles son sus compromisos.
Rechazaron el alza al transporte de 13 pesos la tarifa que pretenden los concesionarios, además de que dijeron debe haber nuevas rutas y una visión ecológica en este servicio.
Luego de un breve mitin frente a Palacio de Gobierno y frente al Ayuntamiento, los manifestantes entregaron un pliego de peticiones y dijeron que es producto del Foro por la Movilidad de Mérida que se llevó a cabo en días pasados.
En el documento entregado se establece que el transporte público es el motor de desarrollo, además de un derecho público que está concesionado a particulares y que hoy no funciona, pues su funcionamiento es gris y con una visión alejada de las necesidades de la población.
“Si no cambian, si no se transforman, serán sustituidos por otros que estén a la altura de la ciudadanía. Queremos que se den resultados y que no se deje a un estudiante con la mano alzada o que no se dé parada a un adulto mayor”, señalaron.
Señalaron que no se trata de una confrontación con los transportistas, pero advirtieron que el movimiento no será “llamarada de petate” o una válvula de escape del encono social, pero seguirá luchando por un cambio verdadero en el sistema de transporte.
“Nos han fallado y nos obligan a organizarnos e invitamos a la ciudadanía a sumarse a la discusión y que se integren mesas de trabajo para tener más propuestas”, señalaron.
