..:: Visión Peninsular ::.. Visión Peninsular, publica solo la verdad de lo que pasa en nuestro Estado, Quintana Roo y Campeche.
Artículos relacionados
El Observatorio Mexicano de Enfermedades no Transmitibles (OMENT), reveló en un estudio realizado por la Fundación Carlos Slim, avalado por la SSA, que la diabetes es la primera causa de muerte en Yucatán, pues la entidad ocupa el último lugar en calidad de atención a pacientes con este padecimiento en las clínicas del Sector Salud, de acuerdo igualmente a las estadísticas de dicha dependencia federal.
Según la investigación realizada por el Observatorio, cuya sede se encuentra en Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), Yucatán fue evaluado con una calificación de 50.2, en una escala de cero a 100.
Hasta el 15 de este mes y según datos de la Dirección General de Epidemiología, se habían diagnosticado 4 mil 236 casos de diabetes mellitus tipo II, cifra que se encuentra cerca de rebasar el total del cierre del año 2015, cuando fueron 4 mil 960. En esta misma fecha del año pasado, el total fue de 3 mil 944.
Otro de los factores causales para que Yucatán se ubique en el último lugar en la atención a la diabetes, es que el Índice de Calidad de Atención a la Diabetes (ICAD) señala que solo cinco de cada 100 pacientes regresan para continuar con el tratamiento luego de ser diagnosticados con la enfermedad y solo 60 de cada 100 consideran como efectiva la consulta con el médico asignado y el tratamiento solo es benéfico en 30 de cada 100.
Asimismo, solo a cinco de cada 100 diabéticos en tratamiento se les practica una prueba de hemoglobina glicosilada al año. Este examen de laboratorio muestra el nivel promedio de azúcar en la sangre durante los últimos tres meses y sirve para determinar qué tan bien está controlando el paciente con respecto a su padecimiento.
El ICAD está conformado con la información levantada en campo en 10 mil 595 clínicas de salud en los 32 estados de la República, que atienden a 534 mil personas que padecen diabetes. La información de Yucatán proviene de 91 clínicas del sector público visitadas durante la investigación.
De las 243 jurisdicciones evaluadas, Mérida (Jurisdicción estatal 1) ocupa el lugar 184; Valladolid (Jurisdicción estatal 2), el número 232, y Ticul (Jurisdicción estatal 3), se encuentra en el sitio 191.
Antes de Yucatán (50.2), calificados en peor atención de la diabetes se encuentran Veracruz (51.5), Sonora (51.9), Guerrero (52) y Chiapas (52.3). De los otros dos estados de la Península, Campeche es el mejor ubicado, con el lugar 11 y calificación de 59.8. Quintana Roo por su parte, se encuentra en el sitio 17, con 58 puntos.
Los cinco estados mejor calificados en atención a la diabetes son Puebla, con 67.5; Aguascalientes, 63.3; Jalisco, 63.3; Guanajuato, 62.7, e Hidalgo, 62.4. La media nacional es de 58.
Otros datos arrojados por el estudio del OMENT son que en Yucatán solo 9 de cada cien pacientes hipertensos inician tratamiento y sólo existen 3.8 nutriólogos y promotores de la salud por cada diez médicos.
Yucatán ocupa el primer lugar nacional en prevalencia de diabetes mellitus entre la población derechohabiente del IMSS, de acuerdo con datos de 2014. Hasta ese año, el reporte indicaba 341 mil 143 pacientes.
De acuerdo con datos del Programa Institucional del IMSS 2014-2018, este organismo atiende actualmente a una población exponencialmente más envejecida (el promedio de la edad de los pacientes es de 61 años), que requiere servicios médicos de alto costo, relacionados principalmente con padecimientos crónico-degenerativos como la diabetes mellitus, las enfermedades cerebrovasculares, la hipertensión y los distintos tipos de cáncer.
Aunado a estos factores externos existen también factores internos que afectan su óptimo funcionamiento. El primero proviene de los altos costos administrativos del Instituto. El segundo factor, es el régimen de jubilaciones y pensiones de los propios trabajadores del Instituto, que ha derivado en un pasivo laboral.
Este programa indica que la diabetes mellitus y la hipertensión arterial concentran la mayor proporción de este gasto, con una participación de 77.9 por ciento.
