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Luis Enrique Lara González, ex presidente del Colegio de Psiquiatras de Yucatán, no acudió ayer a la audiencia de individualización de penas y sanciones, por lo que se le declaró sustraído de la acción de la justicia, o sea desaparecido.
Ayer por la mañana, en una audiencia del Tribunal Segundo de Juicio Oral, que argumentó una “duda razonable” sobre el caso y que permitió la libertad de Luis Enrique Lara González, no pudo imponerle la sanción corporal por el homicidio de su colega Felipe de Jesús Triay Peniche, debido a que no se presentó. No obstante, sí acudieron sus abogados defensores, Juan Góngora Puerto y Patricia Castro González.
Para evitar la aprehensión del ahora “prófugo”, los abogados defensores de Luis Enrique Lara G. preparan amparo contra su detención, y al parecer, está fuera de México.
Dicho tribunal suspendió el proceso en contra de Luis Enrique Lara G. y giró una orden de aprehensión en su contra, para ubicarlo y detenerlo, con el fin que comparezca ante estos juzgadores, por ahora será “prófugo” de la ley.
Desde un principio, cuando se le dejó libre y más cuando el Tribunal de Casación le revocó el fallo absolutorio, se tenía conocimiento que el psiquiatra ya no se encontraba en Mérida; trascendió que en estos momentos podría encontrarse en el extranjero, lo cual no ha sido confirmado.
El acusado no fue detenido desde un principio por una supuesta falla de comunicación entre el Tribunal Segundo de Juicio Oral y el Tribunal de Casación. El 16 de diciembre, dicho Tribunal emitió dicho fallo y declaró culpable a Luis Enrique.
El recurso de casación (anulación de una sentencia) fue solicitado por la Fiscalía, el asesor jurídico de las partes denunciante y coadyuvante por un lado y del sentenciado Pablo Santos García Gutiérrez, que pidieron sea modificada la resolución del Tribunal Segundo de Juicio Oral del Poder Judicial del Estado, emitida el 15 de septiembre de 2016.
Pablo Santos García Gutiérrez fue condenado a 35 años de cárcel y su coacusado y supuesto autor intelectual del homicidio, fue declarado no culpable.
