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Fuente: Diario de Yucatán
Varios ejidos citrícolas del sur de la entidad, denunciaron que fueron víctimas de un fraude cometidos por la corrupción de funcionarios de la SAGARPA en tiempos del gobierno de Rolando Zapata Bello, por millones de pesos, dedicados a un programa federal para la modernización de sistemas de riego.
Los campesinos denunciaron la colusión de los responsables de la delegación de SAGARPA encabezada en ese entonces por Pablo Castro Alcocer, quienes coludidos con varios empresarios, convencieron a los productores de participar en el Programa de Fomento a la Agricultura, componente Mejoramiento Productivo de Suelo y Agua, incentivo de Sistemas de Riego Tecnificado; porque la inclusión de los productores era indispensable para tener acceso a los recursos de ese programa, aunque a los socios se les asignara una mínima parte.
La cuestión es que a pesar de saber que los funcionarios de SAGARPA, ahora Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), desviaron la mayor parte de esos fondos, se acusa a los campesinos de malversar los FONDOS QUE NUNCA RECIBIERON y se turnó su expediente al Sistema de Administración Tributaria (SAT) para la recuperación del recurso supuestamente entregado a ellos.
Sin embargo, el SAT procedió a los embargos de bienes de muchos de esos productores, Con una insólita velocidad al grado de REMATAR sus bienes el mes pasado, a pesar de la contingencia sanitaria por el coronavirus; los campesinos expresaron en la Carta al Presidente López Obrador “Nosotros nunca vinos un solo centavo de ese dinero, no robamos, no desviamos nada”.
“En cambio, los empresarios y funcionarios de la SAGARPA son los que se beneficiaron con el manejo de esos recursos viven felices y sin que nadie los culpe o los presione”.
Al parecer, los supuestos empresarios coludidos con servidores públicos de esa dependencia cobraron el dinero, mediante una estrategia que incluyó compañías “fantasmas”, proveedores de servicios hidroagrícolas y funcionarios de la delegación de la entonces SAGARPA, hoy SADER.
En la Carta explican los detalles de este fraude, principalmente en lo que concierne a dos de los ejidos que firman la carta: la unidad de riego Plan Chac, de Sacalum y la unidad Leona Vicario, de Tekax.
La inconformidad de los afectados se agravó por los remates del SAT y por nuevas revelaciones de algunos de ellos, según las cuales el 30% de dinero del programa de riego paraba en manos de los funcionarios de la SAGARPA como una especie de “moche”.
La carta que los inconformes entregaron a AMLO el 8 de noviembre de 2019 está firmada por los dirigentes de los siguientes ejidos, donde existen unidades de riego: Trinidad Uno, Leona Vicario y Unidad San Fernando, de Tekax.
También las unidades Emiliano Zapata Canek y Kampepén, del mismo municipio, y las unidades de riego Plan Chac y San Pedro Yocat, de Sacalum, y la Unidad Agrícola Dzetabay, de Ticul.
En su carta, denuncian a funcionarios de la delegación local de la Sagarpa, sobre todo los que estuvieron de 2015 a 2018, Pablo Castro Alcocer, delegado de esa dependencia de octubre de 2015 a febrero de 2018, y de su sustituto, Luis Enrique Martínez Ordaz, que permaneció en el puesto hasta diciembre de ese año.
