El presidente de la Cámara de Comercio de Mérida, Michel Salum Francis, manifestó el disgusto de los sectores empresariales, ante la declaración de desabasto de energía para la Península, pues representa retroceso con el consiguiente impacto alto económico.
Asimismo, el empresario señaló que para garantizar la estabilidad de la energía eléctrica, tendría que haber un barco estacionando en Progreso para surtir con gas natural la demanda que requieren las plantas de energía del estado y no hay nada.
Entre sus señalamientos, el presidente de la Canaco Servytur, apuntó que los picos que generan las alzas y bajones de energía, representan un serio problema al sobrecargar los equipos con el reinicio de funciones, daña los equipos y provoca elevados costos de energía que se reflejan en los pagos a la Comisión Federal de Electricidad.
“El sector empresarial de Yucatán emitirá un comunicado con un posicionamiento fuerte y contundente para llamar la atención del gobierno federal ante este tipo de problemas. No hay medicinas y ahora no habrá energía, ¿cuántas personas esperan que se mueran?”, exigió.
El empresario yucateco consideró como un verdadero abuso este anuncio para todas las empresas de la zona peninsular y si en Yucatán habrá apagones, en Quintana Roo el impacto será mucho más alto, debido a que las empresas hoteleras dependen del suministro de energía y muchas de estas empresas no disponen de transformadores o plantas de energía de emergencia, principalmente las pequeñas empresas hoteleras.
“Estamos muy enojados, no es posible que dejen sin energía a la península y que los meses más importantes del verano, cuando las empresas del sector hotelero, restaurantero y de servicios requieren de mayor capacidad para brindar servicios se declaren cortes de energía y no haya medidas para solucionarlo, ni estrategias para resolver”.