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Un adolescente de nombre Jonathan, de 14 años de edad, sufrió un accidente con su moto, y corría el riesgo de morir o permanecer parapléjico; el joven sufrió graves lesiones cervicales que ponían en riesgo su salud, ya que de sobrevivir, cualquier movimiento brusco del cuello, lo haría quedar postrado en cama.
Existía la esperanza para la familia, en una complicada cirugía, que por sus especiales características, nunca se había realizado en el hospital donde Jonathan fue internado, lo que representaba un obstáculo más a la difícil situación.
El secretario de Salud de Yucatán, Jorge Eduardo Mendoza Mézquita, instruyó a todas las unidades del sector salud a unir esfuerzos y movilizar el equipamiento necesario, por lo que los especialistas del Hospital O’Horán decidieron efectuar esta cirugía tan delicada salvar de esta manera la vida del paciente.
El médico cirujano ortopedista, especialista en columna vertebral, quien intervino en la cirugía, indicó que fueron tres las cirugías realizadas: la primera consistió en liberación por vía exterior, la segunda fue para reducción y fijación vía posterior y la tercera, para fijación por vía anterior.
Afirmó el médico que debido a la complejidad, es la primera intervención de este tipo no solo en la historia del hospital sino del estado. El costo de este procedimiento en medicina privada oscila en aproximadamente 500 mil pesos, y para ello se requirió una caja cervical, así como cuatro tornillos y dos barras.
El doctor José Enrique Martel fue apoyado por el médico cirujano de columna, Heberth Gómez Villegas, la anestesióloga Lizeth Dorantes y un equipo multidisciplinario conformado por 15 especialistas en medicina, así como personal de enfermería. Afortunadamente este grupo de profesionales sacó adelante la tarea quirúrgica. La evolución del adolescente ha sido tan satisfactoria que ya camina, y en cualquier momento podrá egresar del nosocomio.
La familia hizo un reconocimiento a todo el equipo que operó al joven, así como al personal de enfermería, por su humanismo y entrega.
Jonathan pronto podrá caminar por las calles sin problema alguno, y seguramente en cada paso recordará el valor de estos especialistas de la salud que le brindaron una segunda oportunidad.
