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Cinco meses de prisión preventiva como medida cautelar, fueron impuestos a Jorge Alberto Moo Yam, quien golpeó de manera brutal a su esposa y luego trató de ahorcarla, por el hecho que la mujer pidió dinero para la leche de la hija de ambos; fue vinculado a proceso penal como probable responsable del delito de lesiones calificadas agravadas y violencia familiar.
El licenciado Luis Edwin Mugarte Guerrero, Juez Segundo de Control del Centro de Justicia Oral de Mérida, al resolver la situación jurídica del imputado, lo vinculó a proceso penal y concedió un mes al Ministerio Público para el cierre de las investigaciones complementarias; de la misma manera, el Juez ordenó tratamiento psicológico para el agresor de 22 años de edad, quien tiene como característica física todo el cuerpo tatuado, así como para la señora de 21 años, quien tiene la carga de dos criaturas.
Se expuso en los hechos imputados, que en fecha 10 de junio, alrededor de las 18 horas, estando la pareja en el predio marcado con el número 418 de la calle 53 por 22 y 24 del fraccionamiento Juan Pablo II, agredió físicamente a su esposa Melissa Aracely Bastarrachea Chablé, quien le había pedido dinero para la leche de su hija; el caso es que al decirle que no tenía dinero ella le dijo que iría a pedirle a su hermana, cosa que lo enfureció y la jaló del cabello, amenazando con matarla si salía de la casa, corrió hacia el ropero y se armó con un cuchillo y le dijo que la mataría; el sujeto
trató de clavárselo a la altura del estómago, pero ella logró esquivarlo, forcejaron y resultó herida a la altura del pómulo izquierdo, el cuchillo se rompió y el tipo la golpea con los puños cerrados en la cara, cabeza y en el ojo izquierdo, la aporreó contra el suelo y le apretó el cuello con ambas manos.
Luchando por su vida, la mujer logró patearlo en los bajos y al liberarse del marido salió con sus dos hijos a la calle y pidió ayuda a un vecino, quien llamó a la Policía y momentos después el agresor fue arrestado.
Las lesiones que sufrió la joven señora no ponen en peligro la vida, pero si tardan en sanar más de 15 días con secuelas pendientes por calificar.
