La mañana de este sábado la policía tuvo conocimiento de una mujer muerta en su domicilio ubicado en la calle 69 por 76, del centro de Mérida, cuando una persona de origen canadiense, de nombre Jean Paul L., de 76 años de edad, aproximadamente a las 11 de la mañana, dio aviso a un vecino que su esposa estaba muerta y éste rápidamente se dirigió a la Avenida Itzáes donde se encontraba una patulla, para informar del hecho.
Los agentes llegaron al predio y encontraron a la mujer, de nombre Henrietta M. de 86 años, también de origen canadiense, acostada en un sofá boca arriba y su cuerpo tapado con una sábana y otra tapándole el rostro y tenía un cable de una aspiradora enredado en el cuello en el cual presentaba manchas de sangre; el canadiense permaneció en la casa cuando llegó la Policía.
La vivienda estaba en orden, sin nada que delatara hechos violentos previos al fallecimiento.
Salvo unas huellas de pies con sangre y un cuchillo de cocina manchado de sangre, todo estaba en orden en la casa, sin nada que delatara alguna pelea.
El canadiense permanecía en la casa y ante lo extraño de los hechos, fue detenido para el esclarecimiento de los mismos.