..:: Visión Peninsular ::.. Visión Peninsular, publica solo la verdad de lo que pasa en nuestro Estado, Quintana Roo y Campeche.
Artículos relacionados
Alerta el sociólogo investigador, Efrén Hernández Martínez, del Centro de Auto Gestión e Investigación Social, de una banda de trata de personas que opera desde años a sus anchas en el estado de Quintana Roo y sus principales ciudades turísticas, en donde explotan laboralmente a sus cautivos, principalmente menores de edad y mujeres, hasta por más de 10 horas diariamente, exponiéndolos a la venta de productos de consumo para adultos, lo que puede ser de riesgo para su salud debido a los hábitos que pueden desarrollar.
Con riesgo latente de ser forzados a prostituirse en las diferentes ciudades turísticas, de acuerdo a lo comentado, a las niñas y niños así como a las mujeres, los traen en camionetas desde el estado de Chiapas, convenciendo a sus familias que los traerán a estudiar y trabajar, y que podrán enviarles dinero para ayudar en sus casas. Pero al tiempo, éstos grupos que operan al amparo de autoridades, solo los devuelven justificándose en que los menores no quisieron estudiar. Y en tanto este grupo se queda con toda las ganancias que les generan vendiendo (aparentemente) cigarrillos y dulces, o induciéndolos en otras actividades que les resulten más lucrativas.
El titular del Centro de Auto Gestión e Investigación Social A.C., dijo que este fenómeno lleva muchos años ocurriendo sin que ninguna autoridad intervenga a favor de los infantes y mujeres, a los que tienen hacinados en cuarterías, con poca alimentación y a los que solo sacan a trabajar para después devolverlos. Sin oportunidad a que estos tomen decisiones propias en su vida.
La trata de personas, principalmente de niñas, niños y mujeres jóvenes sigue ocurriendo en sitios como Cancún, Playa del Carmen e inclusive en Felipe Carrillo Puerto y Chetumal.
“Es un tema muy complejo y tiene varias vertientes. Una de las cosas que tenemos identificadas en el Centro de Auto Gestión es que esta situación lleva por más de dos décadas repitiéndose. La Supermanzana 63 y 64 estaban llenas de cuarterías en donde la población es hacinada. Van vehículos y camionetas específicamente a Chiapas a traer población. Allá estas personas les dicen estas personas a los papás: me voy a llevar al hijo para que estudie y trabaje. A los tres o cuatro meses los regresan y les decían que los muchachos no querían ni trabajar ni estudiar, lo que daba entrada a que continuaran trayendo personas. Y a los que volvían, pues ya una vez conocido el camino estos llegaban por su parte, pero una vez aquí ya los agarraban para someterlos a condiciones cada vez peor”, reconoció.
MODUS OPERANDI
Este fenómeno migratorio les favoreció enormemente a los grupos criminales que encontraron modo de hacerse de dinero y de explotar laboralmente a estos infantes, poniéndolos a trabajar hasta por 12 horas al día, controlándoles en todo momento a través de maltrato, golpes o amenazas.
Situación que se sale de toda línea exigiéndoles a estos menores de edad determinada cuota de ingresos, con advertencias de que si no lo cumplen se meterán en problemas. “Si te das cuenta, en la actualidad tenemos niños en los cruceros, estos son distribuidos en camionetas, lo cual refleja la explotación que se vive.
