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Cerca de 300 millones de pesos es la deuda que tiene el Ayuntamiento con el Instituto Mexicano del Seguro Social, por lo que la diputada local y ex-panista Sandra Sánchez Díaz, se pregunta dónde quedó el dinero que se le descuenta vía nómina a los trabajadores.
Pablo Gutiérrez Lazarus debe dejar su berrinche y aceptar los convenios que otorga el IMSS a los “patrones morosos” con el firme propósito de que se continúe brindando una de las prestaciones más importante a la fuerza laboral de Ayuntamiento.
Porque de seguir en la terquedad de no pagar la deuda alegando que no es suya sino de otras administraciones, 11 mil 600 derechohabientes corren el riesgo de quedarse sin el servicio médico, afirmó la diputada Sánchez Díaz.
La legisladora que representa al noveno distrito en el municipio de Carmen, señaló “el Ayuntamiento de Carmen tiene alrededor de dos mil 900 trabajadores vigentes en el Seguro Social, si promediamos de cuatro integrantes su núcleo familiar, se puede traducir en más de 11 mil derechohabientes”.
Pero recurrir al Tribunal Federal y solicitar cuatro amparos por parte del Ayuntamiento, entonces eso nos demuestra que no existe voluntad de llegar a los acuerdos que terminen este problema.
De forma directa, el actual gobierno estaría heredando un problema financiero a la administración, afectando la estabilidad económica del gobierno entrante al tener que desembolsar una cantidad considerable y reinstalar el servicio a los empleados y sus familias.
El dinero que se recauda bajo el concepto de cuotas obrero-patronales cada quincena, nunca llegan a las cuentas de la institución de salud pública, por lo que gran parte del actual pasivo económico es por concepto de recargos e intereses moratorios.
Si bien es cierto que la deuda se arrastra desde otras administraciones -externó la legisladora- cuando Pablo Gutiérrez Lazarus tomó el cargo en octubre del 2015, la deuda era de 143 millones de pesos.
Se sumaron 47 millones de pesos en 2016 -señalados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF)- para un total de 190 millones de pesos, y ahora se suman el pasivo del 2017 por 110 millones de pesos, para un gran total de 300 mdp.
Lo que quiere decir en la actual administración municipal no se pagaron 157 millones de pesos al IMSS, más que la deuda heredada por sus antecesores en el cargo que hoy ostenta Pablo Gutiérrez Lazarus.
