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El alcalde de Mérida, Mauricio Vila Dosal, invitó a los inconformes que se manifestaron en las puertas de la Subdirección de Mercados del Ayuntamiento de Mérida, a denunciar las irregularidades, con la aclaración de “no todo lo que se denuncia es cierto”.
El grupo de vendedores ambulantes y semifijos acudan a el funcionario Carlos Rejón, de prepotente y corrupto; señalan que supuestamente cobra de 200 a 300 pesos de cuota para ofrecer sus productos en la calle.
“No nos podemos adelantar (a si habrá despidos). Cuando hay una denuncia las cosas se deben investigar, no todo lo que se denuncia es cierto”.
Indicó que cuando la gente extiende una inconformidad, por oficio es atendida e investigada por la Contraloría Municipal; dijo que en este caso, en los próximos días la Contraloría Municipal comenzará con las investigaciones necesarias, y serán ellos quienes determinen si el trabajador del Ayuntamiento realmente está incurriendo en hechos de corrupción, así como decidir la amonestación que se le pondría y en caso de que se interponga una denuncia formal por parte de los vendedores ambulantes, entonces serían las autoridades pertinentes quienes se encargarán del asunto.
70 locatarios del Frente Amplio de Vendedores Fijos y Semifijos “La Concordia”, protestaron el viernes al mediodía en la Subdirección Municipal de Mercados, acusando a inspectores de corrupción y extorsión. El dirigente de la Concordia, Jaime Manrique Manzanero, dijo que inspectores extorsionan con 200 pesos semanales a sus agremiados, si ellos no dan la mordida, les decomisan injustamente sus productos.
Manrique Manzanero calificó como ilegal esta acción porque los vendedores fijos y semifijos, pagan derecho de piso al Ayuntamiento de Mérida, por lo que pidieron que se sancione a los inspectores corruptos. De igual forma, responsabilizó al subdirector municipal de Mercados, Jorge Antonio Jorge, de permitir los excesos de inspectores por lo que debería ser cesado de su cargo.
