Una joven estudiante del COBAY, del poniente de la ciudad, fue atacada el lunes por la tarde por un sujeto con claras intenciones sexuales, por lo que la joven se defendió con uñas y golpes sometiendo al agresor, quien fue detenido gracias a la pronta intervención de la Policía.
Los agentes escucharon el relato de la joven, elementos escucharon el relato de la joven, y el agresor fue detenido y llevado a la Fiscalía General del Estado, que le formuló cargos por abuso sexual, en una audiencia de imputación, en el Juzgado 2º. De Control, y se determinó aplicarle prisión preventiva en su contra.
El inculpado es Cristian C., empleado, de unos 30 años.
Debido a que ni el imputado ni su defensa pudieron demostrar que el sujeto tiene su domicilio en esta ciudad, al no exhibir documento alguno que confirme su identidad, se le aplicó la prisión preventiva, a pesar de que el delito no es considerado grave.
Familiares del acusado intentaron resolver el conflicto antes de que se llegue a los juzgados, pero se encontraron con la oposición de la víctima a cualquier tipo de “arreglo” argumentando principalmente el respeto hacia el sexo opuesto.
La jovencita, de 17 años, de identidad reservada, había salido del Cobay, cercana a ese sector meridano, y cuando se dirigía a su casa ocurrió la agresión.
La audiencia de vinculación se fijó para el martes, plazo en el que el detenido podrá presentar pruebas que considere lo benefician. En la audiencia de ayer jueves, en el Centro de Justicia Oral de Mérida, el acusado declinó referirse al caso, ya que se limitó a proporcionar sus datos personales.