El presidente del Comisariado Ejidal de Calderitas, Mariano Alonso Angulo, solicitó al ayuntamiento de Othón P Blanco mayor control en el manejo de los desperdicios que vierten al basurero de Chetumal, pues está en riesgo la salud de quienes habitan en las cercanías.
Afirmó que las 350 toneladas de desperdicios que en promedio se depositan en el relleno sanitario, cuya vida útil ha sido ampliamente superada, significan un peligro sanitario.
Como se sabe, el Ayuntamiento ha concesionado el proceso de depósito final y separación de desechos sólidos a la empresa Intransiso, misma que debe contar con un nuevo predio, pero hasta el momento no se ha concretado el proyecto.
Supuestamente existen tres opciones en las comunidades Juan Sarabia y Xul-Ha, pero en tanto se cuenta con el predio, la basura sigue acumulándose en el saturado relleno sanitario de Chetumal.
Por ello, Mariano Alonso solicitó estricto control en el manejo de la basura para evitar más afectaciones a la población y ejidatarios que habitan en los alrededores.