Franck Fernández (*)
Fuente: Diario de Yucatán
La historia de las naciones es una de las cosas más inestables que conozco. ¡Cuántos países han existido y después desaparecido! Englutidos por el vecino, desaparecidos para formar uno mayor o diferente… Estados Unidos fue el primer país constituido en el continente americano, seguido no muy lejos por Haití. Durante su historia, los Estados Unidos se vieron ante la posibilidad de ser dividido en dos.
En Europa el país más antiguo país constituido es la pequeña república de San Marino, fundada como la conocemos hoy en el año 301 después de Cristo, seguido de Bulgaria que se constituyó como estado en el año 891.
Claro, Bulgaria tiene en su haber el haber sido conquistada y englutida por el imperio bizantino primero y el otomano después, pero ahí la tenemos, hoy orgullosa república del este de Europa. Bulgaria es un país al que amo de forma particular.
Frigia fue una de esas antiguas entidades territoriales que dejó de existir. Se encontraba en lo que hoy es Turquía central. Frigia es reconocida por su historia, su cultura y, especialmente, por sus contribuciones al arte, la religión y la política en la antigüedad.
Su historia se entrelaza con la de otras civilizaciones cercanas, como los hititas, los griegos y los romanos. Pero no nos equivoquemos, Frigia tenía una identidad propia que ha perdurado a lo largo del tiempo, tanto por sus logros como por los símbolos asociados a ella. Tal es el caso del famoso gorro frigio. Este último, conocido también como el “gorro de la libertad”, tiene un poderoso significado simbólico que ha trascendido culturas y épocas.
La región de Frigia estaba situada en la parte central de la península de Anatolia, en lo que hoy corresponde en gran parte de la actual Turquía. En su apogeo, la civilización frigia fue una de las más influyentes en la región pero, antes de convertirse en una cultura destacada, estuvo bajo la influencia de los hititas. Los hititas, una gran potencia en la Edad del Bronce, dominaron la región de Frigia alrededor del siglo XV antes de Cristo.
Después de la caída del Imperio hitita (hacia el siglo XII antes de Cristo), los frigios comenzaron a tomar más poder en la región. Según las fuentes históricas y las tradiciones mitológicas, uno de los personajes más emblemáticos de Frigia fue el rey Midas, conocido por su toque de oro que, según la leyenda, transformaba todo lo que tocaba en oro. Si bien esta historia tiene un carácter más bien mítico, refleja la riqueza y la fama que Frigia alcanzó en su época.
La capital de Frigia era Gordión, una ciudad de gran importancia, donde se han encontrado notables restos arqueológicos, como tumbas reales y murales. Gordión se encuentra en la actual provincia de Ankara y jugó un papel esencial durante el periodo de esplendor de Frigia, entre los siglos VIII y VII antes de Cristo, cuando su poder alcanzó su máximo esplendor.
Frigia tuvo una gran influencia en la cultura griega y romana, no solo a través de la mitología, sino también por su arte y arquitectura. La región fue conocida por su habilidad en la producción de tejidos, especialmente los tapices frigios, que eran altamente valorados en el mundo antiguo. También se destacaron en la fabricación de cerámica y en la creación de monumentos funerarios, como las tumbas excavadas en la roca. Los frigios también eran conocidos por su música.
En cuanto a la religión, los frigios adoraban a varios dioses, siendo el más prominente la diosa de la vegetación y la fertilidad, Cibeles. Esta diosa fue venerada no solo en Frigia sino que, a lo largo del tiempo, se extendió hacia otras partes del mundo mediterráneo, como Grecia y Roma. Conocida es la fuente de Cibeles que podemos ver en Madrid y que tiene sus pares en otras ciudades del mundo. Los rituales en su honor incluían prácticas como cultos orgiásticos y danzas frenéticas, elementos que la conectaban con la naturaleza y los ciclos de la vida y la muerte.
De Frigia nos viene el famoso gorro frigio, uno de los símbolos más emblemáticos asociados a su cultura y, desde hace ya algún tiempo, representación de una república y sus valores. Este gorro es un sombrero de forma puntiaguda, generalmente de color rojo, que se caracteriza por su suavidad y flexibilidad. En la antigüedad, era usado por los frigios tanto en su vida cotidiana como en sus ceremonias religiosas y actos militares.
El gorro frigio tiene una historia larga y rica, pero fue más que un simple accesorio de vestimenta. Era un símbolo cultural profundamente arraigado en la identidad frigia. En un principio, este tipo de gorro era usado por las clases bajas y los campesinos en Frigia. Sin embargo, con el paso del tiempo, adquirió un significado más amplio y pasó a ser un símbolo de libertad. En la época romana, el gorro frigio fue asociado con la esclavitud, ya que se pensaba que los esclavos usaban este tipo de gorro como parte de su vestimenta. Sin embargo, con el tiempo, su significado comenzó a cambiar. Durante el periodo republicano romano, y especialmente en el contexto de la Revolución Francesa, el gorro frigio pasó a ser un símbolo de libertad y de lucha contra la opresión. El diseño del gorro frigio, con su punta doblada hacia adelante, ha perdurado en muchas culturas. Durante esta Revolución Francesa, su uso se popularizó no solo entre los revolucionarios, sino también en representaciones artísticas y en la iconografía republicana.
Los revolucionarios adoptaron el “ferrero” (un tipo de gorro frigio) como un emblema de su lucha contra la monarquía y el antiguo régimen. Este gorro también fue adoptado en otros contextos históricos y políticos. Por ejemplo, en los Estados Unidos, el gorro frigio fue utilizado en los sellos de la República de los Estados Unidos y aparece en el “Gran Sello de los Estados Unidos” como parte de los símbolos que representan la libertad y la justicia. También podemos ver el gorro frigio en escudos de varias naciones actuales como Francia, Cuba y Argentina, entre otros.
Aunque Frigia como entidad política desapareció tras la conquista de la región por los Lidiios en el siglo VII antes de Cristo y más tarde bajo el dominio de los Persas, su legado cultural ha perdurado. La figura del rey Midas y las historias relacionadas con los dioses frigios siguen siendo parte del imaginario colectivo. A través de su arte, su religión y su influencia política, Frigia sigue siendo una parte importante del legado cultural de la humanidad. Y, aunque esta nación como tal ya no existe, la memoria de los frigios vive en los símbolos y las historias que perduran hasta el día de hoy. No olvidemos que el gorro frigio sigue siendo un símbolo mundial de libertad.
(*) Traductor, intérprete y filólogo.