PROGRESO, Yucatán – Lo que inició como un fascinante espectáculo natural en las costas de Progreso, con el avistamiento de un joven tiburón ballena, rápidamente se convirtió en una alerta de seguridad pública, dejando al descubierto el crítico estado de deterioro del emblemático Muelle de Chocolate.
El pasado viernes por la tarde, la presencia del animal marino, de aproximadamente dos metros, atrajo a más de 100 personas al atracadero. Turistas, habitantes locales e incluso estudiantes de biología marina se congregaron sobre la estructura para fotografiar y grabar el evento, ignorando el peligro inminente que corrían.
Según se constató, el muelle presenta un “grave deterioro”. Las columnas y trabes que sostienen la plataforma de 314 metros de largo por seis de ancho se encuentran visiblemente dañadas. Peor aún, las barandillas de la plataforma peatonal tienen las varillas estalladas, lo que representa un riesgo directo de caída para quienes se acercan.
La situación movilizó a las autoridades. El comandante Omar de la Cruz Herrera Cocom, director de la policía municipal, acudió al sitio para coordinar las labores de seguridad. Tanto elementos policiales como guardavidas exhortaron repetidamente a la multitud a retirarse debido al mal estado del puente y el peligro de un colapso. Sin embargo, los esfuerzos fueron en gran medida inútiles.
Este incidente no solo pone el foco sobre los curiosos, sino también sobre los pescadores locales que utilizan diariamente la plataforma para capturar sardina, pargos y otras especies. La Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona), entidad encargada de la infraestructura, ya ha sido notificada de la amenaza que representa el muelle.