Mérida, 9 de agosto, 2025.- Desde 1964, Yucatán acumula 7,011 personas desaparecidas, según datos de la Comisión Nacional de Búsqueda, una cifra que contrasta con su reputación como el estado más seguro de México.
De acuerdo con organizaciones civiles, la crisis se ha acelerado: actualmente se registra una desaparición cada 17.9 horas, cuando en 2024 ocurría una cada 28.4 horas. Solo el año pasado, la organización Red Lupa documentó 308 casos de personas desaparecidas y no localizadas, con Mérida concentrando 184 casos —el 60% del total estatal—.
¿Cuál es el perfil de las víctimas?
El perfil de las víctimas revela patrones importantes. Según el informe de Red Lupa, una asociación civil dedicada al seguimiento y vigilancia en materia de desaparición, el 74% de los desaparecidos son hombres, 26% mujeres y 8% menores de edad.
Los casos se concentran en cinco municipios: Mérida, Progreso, Kanasín, Tizimín y Maxcanú, con una diferencia de más de 140 casos entre la capital y el resto, de acuerdo con la misma organización.
¿Estado seguro?
La paradoja yucateca es evidente. Mientras una encuesta de Massive Caller ubica al estado entre los tres más seguros del país con solo 31.9% de percepción de inseguridad, y datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública registran apenas 12 homicidios dolosos en el primer semestre del año, las familias de desaparecidos enfrentan una realidad completamente distinta: autoridades que ignoran sus denuncias y una fiscalía sin unidad especializada de búsqueda.
En lo que va de este año, siete personas reportadas como desaparecidas fueron encontradas sin vida, según reportes de organizaciones civiles.
Las madres buscadoras denuncian que las autoridades no solo ignoran sus súplicas, sino que el personal de la fiscalía ejerce violencia contra ellas.
Desinterés oficial
No existe en Yucatán una unidad especializada para búsqueda de personas; estas funciones las absorbe la Policía Estatal Investigadora, evidenciando la falta de prioridad institucional.
Red Lupa señala problemas estructurales más profundos en su análisis territorial: “Tenemos un gobierno empresarial permeado por la corrupción. Yucatán ocupa el primer lugar nacional en abuso sexual y el segundo en suicidios”.
La organización también documentó que en Tekax hay dos mujeres sin identificar porque se perdieron las muestras de ADN y las autoridades no toman las denuncias de desapariciones.
Según denuncias ciudadanas y reportes periodísticos, en el Anillo Periférico y Kanasín proliferan “centros nocturnos” donde funcionan redes de trata de personas.
Un caso reciente involucró a jóvenes colombianas enganchadas y secuestradas en casas de seguridad, cuya liberación requirió intervención federal tras solicitud de la Embajada de Colombia, evidenciando la colusión de autoridades locales.
Aunque Yucatán es el único estado que redujo sus desapariciones en 5% durante 2025, según el informe nacional de Red Lupa, esta aparente mejora es mínima frente a la magnitud del problema.
De acuerdo con la misma organización, México registra 115,616 personas desaparecidas y 52,000 restos humanos sin identificar, una crisis nacional en la que Yucatán, pese a sus índices de seguridad, no es la excepción.